Hace muy poco tiempo emitimos un pronunciamiento de solidaridad frente a la expulsión de un organismo no gubernamental europeo, que a lo largo de su presencia en Bolivia apoyó directa e indirectamente al proceso que hoy vive Bolivia y sin que haya un
mínimo de reconocimiento a la labor prestada a quienes hoy disfrutan del poder, se anunció la expulsión.
Hoy nuevamente salimos ante la opinión pública nacional e internacional para manifestar nuestra protesta airada por el
renovado atropello al Instituto Politécnico Tomás Katari, afiliado al Capítulo Boliviano de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo, organismo que desde su creación ha prestado invalorables servicios a las comunidades del Norte Potosino capacitando a miles de jóvenes en materia técnica, aportando de esa manera al desarrollo social y económico de la región y promocionando a las personas en el marco de su formación profesional.
En marzo pasado ya se produjo un atropello dirigido a despojar al IPTK de su patrimonio, que más allá de ser una propiedad privada, constituye una capacidad instalada y en funcionamiento al servicio de las comunidades que han recibido beneficios de esta institución.
En esta oportunidad, al amparo de un supuesto “convenio tripartito” se pretende arrebatar la infraestructura y equipos del IPTK con el supuesto destino de la creación de un instituto de formación técnica a cargo del Estado. Sin duda que la intención de crear esa y otras instituciones educativas en el campo técnico son plausibles, pero no se lo puede hacer a costa de otros, no se puede impunemente arrebatar la propiedad de otras organizaciones como en este caso el IPTK y quizá mañana no se sabe cuáles.
El marco legal de la L070 establece la prioridad de la capacitación técnica, a través del modelo socio comunitario productivo y el bachillerato técnico humanístico, pero no dice que se lo haga aplicando la lógica de la depredación ni el despojo, no establece que el Estado se apropie de lo ajeno ni obligue a firmar convenios fraudulentos para hacerse de equipos, currículos, predios y otros que el IPTK posee.
Es necesario que la comunidad nacional, amante de lo correcto y respetuosa de la ley, así como la comunidad internacional que apoya al proceso que vive Bolivia sin ninguna limitación, no solo conozcan el atropello del que está siendo objeto el IPTK sino también se pronuncien e interpongan sus buenos oficios para evitar que este despojo se consolide, constituyéndose en uno más de los errores que se están cometiendo.
A través del presente pronunciamiento y ante eventuales nuevas acciones similares, convocamos a las organizaciones y redes nacionales e internacionales, organismos multilaterales, movimiento popular y todos cuantos rigen su accionar por el respeto a la ley y el respeto a la institucionalidad, pronunciarse respecto del despojo y atropello al IPTK, haciendo que sean muchas las voces que exigimos respeto, imperio de la ley, seguridad jurídica y ciudadana para quienes aportamos con nuestro esfuerzo al proceso actual, no solo en la coyuntura sino lo hemos hecho desde nuestras convicciones en la construcción de otra sociedad que es posible.
La Paz, 30 de diciembre 2013.
DIRECTORIO DEL CAPITULO BOLIVIANO DE DERECHOS HUMANOS, DEMOCRACIA Y DESARROLLO
Bajar archivo pdf CBDHDD_Pronunciamiento-Publico_IPTK_30Dic13