La Red Rural de Organizaciones Privadas de Desarrollo espera que este año que se inicia traiga consigo mejores oportunidades a la ciudadanía en general y a las familias campesinas en particular, así como mejores oportunidades para un crecimiento y desarrollo integral y digno.
Valora el esfuerzo que realizan sectores público y privado y sobre todo del labriego, en favor de una agricultura familiar campesina que pueda garantizar la producción de alimentos saludables y nutritivos, así como un mejor cuidado del medio ambiente ante los avances del cultivo masivo de soja que cada vez contamina más el ambiente y ante la salvaje deforestación de bosques nativos tanto en la región Oriental como en la Occidental.
El Gobierno dictó en el 2015 el decreto número 4565, por el que reconoce la agricultura familiar como aquella que es desarrollada por los grupos familiares donde la mayoría de sus miembros están ocupados y sirve como medio de ingreso económico. La medida oficial exhonera del pago del 10 por ciento, del impuesto al valor agregado (IVA) y del impuesto a la renta agropecuaria (Iragro).
Será de suma importancia un sostenido y constante apoyo gubernamental a este sector productivo, de tal modo a producir alimentos saludables para una vida de mejor calidad y lograr un desarrollo integral sostenido para toda la población.
En este balance del año que fenece es digno destacar expresiones y reclamos constantes contra prácticas de corrupción de parte de la ciudadanía y muy particularmente de jóvenes estudiantes y universitarios que durante la «primavera estudiantil» lograron importantes cambios en la estructura de la Universidad Nacional de Asunción. Es de esperar que ese despertar estudiantil persevere en busca de lograr un mejoramiento integral de la educación en el Paraguay.
La Red Rural se solidariza con miles de compatriotas damnificados por la crecida de los ríos como consecuencia de las constantes lluvias y tormentas que azotan al país en estos tiempos, y que se ven obligados a abandonar sus casas y en muchos casos perder sus bienes.
Valora la solidaridad de diversos sectores de la ciudadanía en favor de estos compatriotas y aboga porque, de una vez por todas, las autoridades correspondientes encaren soluciones definitivas que acaben con la incertidumbre y la zozobra en que viven miles de familias en zonas ribereñas del país. Estos compatriotas tienen todo el derecho a la ciudad, a gozar de ese derecho humano colectivo.
Reitera nuevamente este año al Estado paraguayo que garantice un juicio justo en el emblemático caso «Masacre en Curuguaty», y en todos los casos donde se dirimen derechos de sectores vulnerables de la sociedad. Uno de esos casos también es el caso de trabajadores de la línea 49 que reclaman el reconocimiento de su sindicato y la reposición de trabajadores despedidos. Los mismos realizan una prolongada huelga, incluso la crucificción de algunos de los afectados. Hace meses se encuentran apostados al costado del Ministerio del Trabajo sin que la autoridad competente reconozca el sindicato y ordene la reposición de los despedidos.
Finalmente reclama al Gobierno que implemente prácticas de honestidad, patriotismo y eficiencia en sus funciones en favor de un crecimiento digno y equitativo que permita acortar brechas de desigualdad reinantes en sectores de la población.
Red Rural de Organizaciones Privadas de Desarrollo
Diciembre 2015